Desde los más chiquitines, es decir los de transición, hasta los más grandes de sexto año de escuela siguen a cabalidad los protocolos sanitarios adaptados en sus centros de educación públicos con tal de evitar el contagio por el Covid-19 y continuar las clases de forma presencial.
Desde el pasado lunes, un total de 1.196.152 estudiantes de todos el país retomaron las clases asistiendo físicamente a las aulas como parte del plan regreso seguro de Ministerio de Educación Pública (MEP).
Entre ellos, los alajuelenses, por ejemplo: la escuela David González Alfaro, ubicada en Rio Segundo de Alajuela, donde los alumnos más grandes y pequeños se distancian por fuera y dentro del aula, se lavan constantemente las manos y mantienen puestas las mascarillas todas las horas lectivas y eso hace el trabajo docente más fácil.
Olga Palma, maestra de quinto grado de esa institución confirma que, «Está muy satisfecha, todos los estudiantes de este grupo asistirán si Dios quiere y se implementaron muy bien los protocolos. Sin embargo, los chicos tienen el deseo de jugar y compartir».
Otro gran ejemplo de disciplina lo dan los pequeñitos del Jardín de Niños Juan Rafael Meoño, en el Brasil de Alajuela, quienes felices de regresar con sus maestras para aprender y compartir con sus compañeros aún distanciados, siguen reglas para auto cuidarse.
Viviam Ramírez, directora del Jardín, comentó que todas las maestras están al tanto de cumplir los protocolos de salud al ingreso, durante y a la salida de las lecciones.
«Pudimos organizar el retorno a clases de la mejor manera, tomamos todas las medidas de los protocolos que se necesitan, marcamos las distancias en el suelo con el 1.80 metros, en la entrada del portón se les tomó la temperatura, se desinfectan los zapatos en una alfombra, se lavan las manitas y cada maestra les pone alcohol en gel, desde el primer día los niños acoplan las reglas de la docente de forma satisfactoria», señaló Ramírez.
Ambas instituciones, incorporan el espacio para la merienda de los niños y niñas, ya sea en un lugar idóneo para ello o bien en sus mismas mesas de trabajo, antes de ello, se lavan sus manos y luego de terminar desinfectan los pupitres para continuar.
Tanto Ramírez como Palma, indicaron que los estudiantes no se quitan las mascarillas en todo momento, mientras reciban las clases, solamente para merendar.
En los centros educativos mencionados, así como en la mayoría del país, las clases presenciales se brindarán a los educandos en un promedio de 1 a 2, mientras que las virtuales una vez a la semana, y los días que no asisten a deben trabajar con las ya conocidas Guías de Trabajo Autónomo (GTA).