El sábado anterior, en horas de la tarde, la Fuerza Pública detuvo una monta de toros clandestina en Jomusa del cantón de Upala de Alajuela.
En ella, y según los oficiales se encontraban 20 personas aglomeradas, además de niños y sin ningún protocolo sanitario a cumplir para frenar la propagación del Covid-19.
Un hecho similar se registró hace tres semanas, dentro de una plantación de cacao ubicada en el mismo sector, cuando las autoridades intervinieron una gallera escondida donde había gran cantidad de personas tomando licor y participando de una ilegal pelea de gallos.
De acuerdo con lo declarado por el comandante Rodrigo Alfaro, subdirector regional de la Fuerza Pública en la frontera norte, gracias a la colaboración de la ciudadanía lograron recibir una denuncia, vía 9-1-1, acerca de que se estaba realizando una monta de toros en un corral.
Alfaro indicó que, bajo indicaciones del Ministerio de Salud, al administrador del lugar, un nicaragüense residente de apellido Martínez, le informaron acerca de que no podía celebrar esa actividad, además de realizar una clausura preventiva del inmueble.
De igual forma, se las autoridades indicaron a Martínez que, de incurrir nuevamente en este tipo de actividades ilegales, sería detenido por el presunto delito de desobediencia y quedaría a la orden de la fiscalía local.
Aunado a la acción policial el Servicio Nacional de Salud Animal (SENASA) también fue notificado.