La idea de reducir los límites de velocidad establecidos a 30 kph en calles urbanas del país, es promovida por el gobierno de la República tras recomendación de la Organización de Naciones Unidas (ONU).
De tal forma que, se busca generar mecanismos y gestionar herramientas legales para poner en práctica la idea, especialmente en donde usuarios peatones y ciclistas interactúan constantemente con vehículos automotores.
La propuesta tuvo su apoyo este viernes durante el foro “Calles para la Vida” organizado por la Organización Mundial de la Salud en el marco de la VI Semana Mundial de Seguridad Vial, en cual participaron el Consejo de Seguridad Vial, el Despacho de la Primera Dama de la República, municipalidades y colectivos de ciclistas.
Datos del Observatorio de Seguridad Vial del COSEVI demuestran que entre 2016 y 2020 fallecieron 485 personas en accidente de tránsito en donde medió el exceso de velocidad
Espacios más seguros para todas las personas. Durante la actividad se destacó que la interacción (automotores/peatón, automotores/ciclistas) en calles urbanas aumenta la exposición al riesgo de aquellos usuarios vulnerables que no cuentan con ningún tipo de protección, pero que son usuarios frecuentes de esas vías, lo que trae como fatal resultado una gran cantidad de lesionados graves o un número importante de fallecidos por esa convivencia diaria en carretera.
“Promovemos la generación de espacios que sean seguros para todas las personas, ya sea que se movilicen en autobús, en tren, en su vehículo particular, en bicicleta o caminando, y por eso es importante que se generen acciones para proteger la vida de las personas y permitirles movilizarse en espacios que puedan compartir de forma seguro, como por ejemplo en calles que tengan una disminución de velocidad permitida”, explicó la Primera Dama, Claudia Dobles Camargo.
El director ejecutivo del COSEVI, Edwin Herrera Arias, indicó que actualmente en nuestro país la velocidad máxima para circular en centros de ciudad es de 40 Kmp, sin embargo, desde el inicio de la pandemia se ha dado una mayor circulación de medios de transporte no tradicionales como por ejemplo las bicicletas que han venido a convertirse en una opción segura para evitar contagios por COVID-19.
Esta medida contribuye al cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible en el país, especialmente en los temas relacionados con ciudades y comunidades sostenibles, así como con salud y bienestar.